miércoles, marzo 15, 2006
CONCLUSIÓN
Ya se que habia dicho que posiblemente no lo actualizaría más, pero necesitaba escribir hoy, reflexionar un poco, hacer una especie de postdata, un final, rallarme un rato básicamente, porque seguramente acabaré escribiendo más cosas aqui, pero necesitaba decir esto.
Muchas cosas han cambiado desde estos primeros escritos, ya no hay dudas, no hay miedos ni angustias, no hay un dolor profundo y amargo agazapado al fondo de mi corazón ni una mente torturada por cientos de crueles pensamientos, ya se han esfumado esas preguntas insistentes y asfixiantes que me destrozaban el alma ¿Por qué yo? ¿por qué soy diferente? Ya han pasado dos años desde entonces, ya tengo las respuestas, ¿Por qué yo? Porque yo soy yo, soy así y si no lo fuera no sería yo ¿por qué soy diferente? Porque todos lo somos, las diferencias nos hacen especiales, únicos y maravillosos, ahora me siento más libre, no se han borrado todas las preocupaciones, aún tengo miedo a muchas cosas, cosas a las que tal vez no tuviese que enfrentarme en otra situación, aun tengo miedo al rechazo, a las miradas, al odio, a la enfermedad, pero ya no es un miedo que me paraliza y que me hace querer esconderme, solo es algo que me hace estar alerta pero sin quitarme el sueño.
No me extraña que lo llamen salir del armario, es un símil muy bueno, estas ahí, en la oscuridad, en un espacio pequeño, asfixiante, con la limitada visión de la realidad que te ofrece el agujero de la cerradura, faltándote el oxígeno hasta que hace que se te vaya la olla y empieces a pensar cosas raras, cosas imposibles, cosas horribles, escondido, esperando que lo que sea que te da miedo se marche, hasta que un día no puedes más y necesitas contárselo a alguien o bien necesitas mas sitio para ropa que yo abulto mucho y te decides a abrir la puerta.
Las cosas se ven muy distintas cuando vuelves a tener oxígeno en el cerebro, te das cuenta de todas las tonterías que has pensado, que la gente no es tan mala como pensabas, que no todos merecen ser destripados vivos y puestos al sol para que las gaviotas les arranquen las entrañas... estooo... ya digo, se piensas cosas muy raras. Pero cuando entra luz ves que la gente que te rodea merece la pena, que el mundo no está tan anclado en la prehistoria, que no hay tantos prejuicios, que hay gente que te quiere seas como seas porque te quieren a ti y no a la ilusión que habías creado, tengo unos amigos geniales, ahora me siento imbécil por haber tardado tanto en confiar en ellos, ahora me siento ridículo por haber pensado en acabar con todo, que niñato eras, menos mal que tuviste la madurez suficiente para esperar o que nunca tuviste güevos.
Aún no he salido por completo, digamos que estoy fuera pero con un arnés de seguridad preparado para saltar dentro si hace falta, no saldré del todo mientras no lo sepan mis padres pero por ahora ya lo sabe la gente que me importa, al menos como decía al principio muchas cosas han cambiado, afortunadamente para mi, por ahora todas han cambiado a mejor, cuando empecé estos textos sentía que nunca tendría valor para cambiar las cosas, que siempre estaría escondido, que nunca podría ser padre... lo único que no cambia es que no tengo novio pero bueno, todo no podía ser perfecto, cuando leo estos escritos recuerdo toda la angustia de aquellos tiempos, cuanto dolor absurdo, cuantas lágrimas inútiles, al menos esto me ayudó a ser más maduro, a pensar las cosas con calma y desde una cierta distancia, al fin y al cabo somos el resultado de todo lo que vivimos, a saber que clase de gilipollas sería si no hubiese pasado por todo esto.
Un abrazo a todos los que habéis estado ahí para hacerme sentir un imbecil por no confiar antes en vosotros y un beso para ti Alicia por ser la primera persona a la que le abrí mi corazón, gracias por cuidarmelo tanto.
